Prensa Explícita La realidad al desnudo
Maximiliano Sergio Cordero fue detenido en un operativo conjunto entre la Policía Federal y la Bonaerense. Todavía hay 10 prófugos.
Un séptimo prófugo de los 17 presos que se escaparon en la noche del lunes 23 de diciembre de la alcaldía 9 del barrio porteño de Liniers fue recapturado este sábado en un asentamiento de la localidad de Tortuguitas, en el partido bonaerense de Malvinas Argentinas. Tras conocerse la detención, la ministra de Seguridad de la Nación, Patricia Bullrich, exprimió la noticia para cuestionar la «última gestión» del exjefe de gobierno porteño Horacio Rodríguez Larreta.
El joven, identificado como Maximiliano Sergio Cordero, estaba refugiado en la casa de su novia en una villa en la localidad bonaerense de Tortuguitas, partido de Malvinas Argentinas. De esta manera, ya son siete los evadidos que fueron recapturados.
Cordero nació en marzo del 1999 y está detenido por una causa por tentativa de robo a mano armada con un juicio en contra a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal y Correccional N°28. Cabe destacar que este viernes trascendió que ya habían sido recapturados Danilo Alfredo Serra y José Gabriel Salina. El primero fue encontrado mientras caminaba por Constitución, mientras que Salina se encontaba en la casa de su abuela.
Todavía falta encontrar a Brian Valdebenito; Gastón Riquelme Alana; Cristian Ignacio Zavala Ramírez; Rodrigo Molina Meléndez; Jonatan Cristofer Espinoza Vilches; Luis Leiva Galván; Alejandro Uribe Paves; Roger Adaro Daves; Kevin Gastón Villalba y Ignacio Cristian Ramírez Zavala.
Un video del momento posterior de la fuga muestra a parte del grupo -que salió por tandas de la comisaría- caminando como si nada por la calle pasadas las 22.20 del lunes.
Mientras tanto, cinco oficiales de la Policía de la Ciudad que estaban destacados en la comisaría de Liniers fueron imputados por la fuga. Los agentes están acusados de «favorecer la evasión de detenido o condenado», por lo que, si son hallados culpables, podrían recibir una pena de entre un mes y cuatro años de prisión. Además, si el autor es un funcionario público, se le impondrá una inhabilitación absoluta por un triple tiempo.
Esta evasión masiva derivó en la remoción de Pablo Kisch y Jorge Azzolini, jefe y subjefe de la policía porteña, respectivamente, quienes fueron reemplazados por Diego Casaló y Carla Mangiameli.
