Es la primera vez que un mandatario de Israel en funciones se enfrenta a un juicio.
Benjamin Netanyahu.
El primer ministro de Israel, Benjamin Netanyahu, se sentó el martes en el banquillo en su largo juicio por presunta corrupción. El mandatario aseguró que es el primer interesado en «decir la verdad» y arremetió este lunes contra el sistema judicial y los medios de comunicación, a los que acusó de difundir «noticias falsas».
Netanyahu ha intentado repetidamente retrasar su comparecencia ante el tribunal, donde enfrenta cargos de soborno, fraude y violación de la confianza pública en tres casos separados. Se espera que en la audiencia de hoy el primer ministro israelí suba al estrado de testigos por primera vez, respondiendo a las acusaciones y testimonios hechos en su contra, incluidos los de excolaboradores cercanos.
Se espera que el primer líder en funciones de Israel en enfrentar un juicio penal, testifique por primera vez cuando su caso de corrupción se reanude este martes. El mandatario aseguró que es el primer interesado en «decir la verdad» y arremetió este lunes contra el sistema judicial y los medios de comunicación, a los que acusó de difundir «noticias falsas».
La última vez que compareció físicamente ante el tribunal fue en junio de 2023. Por razones de seguridad, el juicio se trasladó de Jerusalén a Tel Aviv, donde Netanyahu testificará en una cámara subterránea. «Hablaré ante el tribunal. No voy a huir», aseguró anoche en una conferencia de prensa en la que también estalló contra la prensa.
“Cacería de brujas implacable”: el descargo de Netanyahu contra la prensa y la Justicia
En una acalorada rueda de prensa, la primera en casi 100 días, el jefe del Ejecutivo israelí cargó duramente contra la Justicia, alegando que «está llevando a cabo una cacería». «Todo va bien en un intento de derrocar a Bibi (su apodo). Creo que es terrible y simplemente no es aceptable en un país democrático», denunció.
«Miren cómo funciona el sistema. Hay decenas de personas a las que sistemáticamente se les arruina la vida, se les chantajea con amenazas, se les aísla… todo para que presten falso testimonio. Se las amenaza con que no tendrán sustento, con que no tendrán futuro», aseguró, tratando de vincular su caso con el arresto de su asesor, Eli Feldstein, acusado de filtrar información clasificada sobre las negociaciones para liberar a los rehenes secuestrados por Hamas.
«Ese es el método no solo en mis interrogatorios, ¿así que después de todo eso no quiero hablar? ¡Mañana hablo! No estoy pidiendo y no he pedido privilegios, pero espero que no me falte ningún derecho. Es muy inusual testificar tres veces a la semana, se pueden equilibrar las necesidades del Estado y la ley», ha señalado.
Asimismo, Netanyahu criticó a la prensa por difundir «noticias falsas». «Escuché en los medios que quiero evadir el juicio. Que lo quiero esquivar. Qué tontería. Llevo ocho años esperando este día. He estado esperando durante ocho años para presentar la verdad, esperando finalmente hacer estallar las acusaciones delirantes y sin fundamento que se dirigían contra mí», declaró el primer ministro, denunciando nuevamente lo que llamó una «cacería de brujas implacable».
Netanyahu encaró a algunos de los periodistas presentes en la sala: «Escucho tus mentiras todos los días.¡Constantemente estás difundiendo mentiras! Esta es una oportunidad para decir la verdad, conozco a Feldstein como sionista, como alguien que dejó el mundo de la Torá, se alistó en las Fuerzas de Defensa de Israel. Estoy conmocionado por estas investigaciones, por la forma en que se trata a estas personas», exclamó.