Desde las 0 de este sábado comienza la segunda etapa del blanqueo de capitales en la que el impuesto especial subirá al 10% y en la que solo se podrán declarar cuentas o bienes registrables.
Luis Caputo, ministro de Economía.
Tras prorrogarla por una semana más, el ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, dio por cerrada este viernes la primera etapa del generoso blanqueo de capitales con el que el gobierno de Javier Milei intentó reforzar las más que exiguas reservas del Banco Central de la República Argentina (BCRA).
A través de su cuenta en la red social X «Toto» Caputo celebró este premio que la gestión libertaria otorgó a los evasores y anunció que el monto declarado llegó a los 22.500 millones de dólares.
«Hoy se termina la primera etapa del proceso de Regularización de Activos. El monto declarado en efectivo hasta el día de ayer fue de u$s20.085 millones de dólares», afirmó Caputo e indicó que «adicionalmente, se declararon u$s2.432 millones de dólares por otros conceptos» que incluyen cuentas bancarias y financieras, y bienes registrables.
«Muchas gracias a todos los argentinos que han confiado en este profundo cambio de rumbo económico, político, cultural e institucional que el Presidente Javier Milei está llevando a cabo», finaliza el mensaje de Caputo.
El resultado de la primera instancia del blanqueo, que era lo que mas le interesaba a la actual administración, superó en un 400% a las estimaciones que se hicieron previo al inicio del proceso. El resultado se debe, más que nada, a que se trata de un plan muy generoso y barato.
Es que quienes blanquearon hasta 100 mil dólares en efectivo lo hicieron de manera absolutamente gratuita. No tuvieron que poner un solo peso por haber evadido al fisco en el pasado.
De las 105 mil Cuentas Especiales de Regularización de Activos (CERA) que se abrieron, la mayoría fueron para blanquear cantidades pequeñas, por debajo del umbral, es decir, que blanquearon a costo cero. Quienes blanqueaban más de 100 mil dólares estaban alcanzados por una alícuota del 5% sobre el total de lo declarado.
Técnicamente, desde mañana los que tienen dinero blanqueado en cuentas especiales podrán retirarlo, siempre que sea menos de 100 mil dólares. En tanto quienes blanquearon montos superiores y quieren evitar pagar el impuesto tendrán que dejar esos fondos en el sistema de cuentas CERA por lo menos hasta el 31 de diciembre de 2025.
Esto implica que las personas podrán, por ejemplo, comprar una vivienda y pagar con una transferencia a otra cuenta CERA, del vendedor, y si este mantiene allí el dinero, no tributará nada. También se podrán hacer inversiones en bonos del Estado, pero siempre que el dinero se mantenga dentro del ecosistema de CERAs hasta el fin del plazo legal.
A partir del sábado a las cero se abre una segunda etapa, en la que el impuesto especial subirá al 10% y en la que solo se podrán declarar cuentas o bienes registrables. Aquí el umbral de 100 mil dólares actúa como un mínimo no imponible, es decir que el impuesto especial se paga por lo que excede ese piso. Por caso, una casa valuada en 180 mil dólares pagará la alícuota por solo los 80 mil dólares que exceden el mínimo no imponible de 100 mil dólares. Este pago se hace además al tipo de cambio oficial lo que hace también que el pago sea mas barato.
Según estimaciones realizadas por la Cconsultora 1816 en base a las estimaciones de recaudación del impuesto especial, presentadas al inicio de la gestión por el equipo económico, la cifra total de blanqueo de capitales podría llegar a los 40 mil millones de dólares, incluyendo dinero en efectivo y bienes.