El gobierno de Javier Milei se valió del dato de un solo mes para asegurar que los salarios le ganan a la inflación. Desde el inicio de la gestión libertaria la pérdida de poder adquisitivo de trabajadores y jubilados fue generalizada.
El presidente Javier Milei.
Javier Milei cumple este lunes sus primeros seis meses al frente del Gobierno y, en un intento por mostrar algún dato positivo en medio de la licuación de salarios y haberes jubilatorios y de la destrucción de miles de puestos de trabajos, buscó reforzar el relato y tomó un dato aislado para dar cuenta de una supuesta mejora en la situación de los trabajadores.
Para ello tomó una parte por el todo. Y aunque los salarios vienen perdiendo sistemáticamente frente a la inflación desde el inicio de su mandato, ahora se valió del dato de un solo mes para asegurar lo contrario.
Decidido a no ver la película entera, y sólo el fotograma que le ayuda a reforzar su relato Milei celebró los datos oficiales de los salarios reales privados del mes de abril, aunque advirtió su evolución dependerá de la aprobación de la ley de Bases, que se debatirá este jueves en el Senado.
«La Oficina del Presidente comunica que los datos oficiales de abril revelan la recuperación más significativa de los salarios reales privados de los argentinos desde el año 2009”, comienza el comunicado oficial publicado en las redes sociales.
«Esta información se corrobora en lo resultados del Panorama Mensual de Trabajo Registrado, elaborado por la secretaría de Trabajo. En este contexto, las cifras de abril evidencian un incremento del 16,1% en los salarios, mientras que la inflación se situó en un 9,8%. Esto implica que los sueldos están creciendo aproximadamente al doble de la inflación”, aseguró la Presidencia sin dar cuenta de la pérdida en los meses anteriores que todavía los trabajadores no lograron recuperar.
En ese sentido, consideró que “esto implica que los sueldos están creciendo aproximadamente al doble de la inflación”, por lo que “los argentinos comienzan a experimentar una recuperación del poder adquisitivo de sus ingresos, gracias a la desaceleración de la inflación mensual heredada del gobierno anterior, la estabilidad de precios y la eliminación del déficit fiscal, que generaba incertidumbre sobre la solvencia del Estado”.
“Estos resultados demuestran que, con un plan económico serio y un Estado que deja de ser un obstáculo para la producción y el empleo, es posible revertir años de decadencia. Argentina está en camino de convertirse en una potencia económica, desprendida de las ataduras del gasto público descontrolado y la intervención estatal”, consideró la carta publicada por la Oficina del Presidente.
Por último, destacó que “para acelerar este proceso de recuperación económica es fundamental que el Congreso apruebe la Ley Bases, con el fin de liberar la fuerza productiva de los habitantes de la Nación Argentina”.